En la exposición “Esteganografía, Paisaje enmascarado”, los creadores desarrollan un inusual paisaje, donde articulan un gran número de objetos de uso cotidiano y diversas procedencias, completamente cubiertos con masking tape, como si una densa capa de nieve o un manto de ceniza volcánica los hubiera tapado en toda su extensión. De esta forma, componen un escenario abstracto, donde los elementos, que parecen detenidos en el tiempo, pierden su forma real, transformándose en “ideas” de objetos, generando una ilusión óptica de sugerente atractivo, permitiéndonos como observadores, otorgar un significado diferente a este inhóspito paisaje.